Unas navidades cálidas

Plaza del Ayuntamiento de Valencia, España

Este post viene cargadito, porque ya hace un tiempo que tengo mi blog algo abandonado, en los posts que escribiré más adelante explicaré el porqué, y es que han pasado muchas muchas cosas en estos últimos meses. Pero vayamos por partes. Hoy os quiero hablar de mi navidad, pero primero quiero desearos un muy felíz 2010 lleno de alegrías, sorpresas, buenas noticias, sueños cumplidos y por cumplir, momentos inolvidables y mucho amor. Este precioso número no puede sino traer cosas buenas.

Este año hemos vuelto a casa por Navidad y hemos disfrutado de la compañía de la familia y de amigos. Este mes Jackie propuso el tema de la Navidad para el grupo de fotografía de La vuelta al mundo. Todos nos lanzamos a las calles para intentar retratar lo mejor posible la navidad en la ciudad elegida. Yo elegí mi ciudad natal, Valencia, aprovechando mi estancia navideña.

Ayuntamiento de Valencia, España.

En Navidad, Valencia se viste con su traje de luces. Desde los árboles, palmeras, hasta los edificios, todo se llena de bolitas de luz. Este año, el árbol principal era también de luces, mejor dicho, de lluvia de luces azules, y estaba culminado por una estrella gigante en su cúspide. Además, este año tuvimos hasta 25 grados algunos días de Navidad, fueron unas navidades muy cálidas.

Hay muchas cosas típicas en la navidad española. Para empezar, no hay navidad sin turrón ni dulces.

El turrón lo hay de muchas clases: de chocolate con almendras (mi favorito), nata nueces (una especie de mazapán a base de almendras y con nueces dentro), yema tostada, turrón duro (hecho de almendras y miel), turrón blando (más almendras, muy rico), y muchos otros. El más famoso proviene de Xixona, una ciudad de Alicante, al sur de Valencia. Polvorones, almendras (como las que aparecen en la esquina izquierda de la caja de la foto superior) hechas con una pasta por dentro y una especie de hoja de pan por fuera, y fruta escarchada decoran los escaparates de algunas tiendas.

Fruta escarchada

Aunque mi dulce favorito navideño es el mazapán, que también tiene muchas variantes.

Una tradición de mi familia es jugar a la lotería en Navidad e intercambiar números. Así si toca nos toca a todos. Una parte de mi familia es de Albacete y ellos compran décimos para todos. Nosotros en Valencia también, y luego los intercambiamos. Este año sólo tocó devolución de uno de los décimos, unos 10 euros por persona, pero nada más. Es más por la ilusión y por permitirse soñar despierto. ¿Y si nos tocara El Gordo? Nosotros fuimos a comprar este que aparece en la foto, en una de las administraciones de lotería más famosas de Valencia, la de Santa Catalina. Nosotros y muchos otros, como se puede ver en la foto.

Administración de lotería de Santa Catalina, Valencia.

¿Sabíais que el gordo tocó justo en la administración de al lado? Pero no nos habría tocado porque nosotros queríamos un número acabado en 7. Lo que sí que nos tocó es compartir momentos muy especiales con nuestras familias y amigos. Eso no tiene precio, el tiempo pasado con cada uno de ellos y lo compartido. Por eso, quiero aprovechar para darles las gracias a todos por hacernos pasar una navidad inolvidable y regalarnos tanto amor y un pedacito de su tiempo.

Y muchas gracias a todos los que me leéis, por vuestra compañía y paciencia, y por esos cariñitos que me dejáis. Por eso y por muchas otras cosas, muchas gracias! Espero que hayáis pasado unas navidades inolvidables y que este año que entra sea aún mejor que el que dejamos atrás.

En breve os cuento más cositas, mientras tanto, podéis daros una vuelta al mundo para ver la navidad en cada rincón del planeta pinchando aquí (Blog de Casi en serio de Jackie). Tenéis diversión garantizada!